Autora: arq. Teresita Sacón | Entrevistas realizadas por: Ma. Laura Brandolini, Ricardo De Francesco y Teresita Sacón.
En el marco del trabajo entre Proyecto Habitar y la Plataforma por el Derecho a la Ciudad, realizamos una serie de entrevistas para indagar en los diversos modos de gestión del hábitat en los Municipios de Área Metropolitana de Buenos Aires donde se han conformado Consejos Locales de Hábitat. Estos son instrumentos con fuerte potencial en dos aspectos: como articulador entre actores de distintos sectores que realizan transformaciones en la ciudad, y como promotor de la democratización de la toma de decisiones en materia de hábitat.
En esta ocasión, entrevistamos al Director de Hábitat y Vivienda del Municipio de Morón y a representantes de tres organizaciones que, además de contar con una larga trayectoria de trabajo en hábitat en este municipio, han participado activamente en la creación del Consejo Local.
Para profundizar en el conocimiento sobre la implementación en el distrito, indagamos sobre los trabajos específicos sobre la temática que ha realizado y realizan en este municipio, sobre las dificultades y avances en la gestión del hábitat, y las motivaciones que los llevaron a impulsar la creación del Consejo Local.
Punto de partida
El Área Metropolitana de Buenos Aires está integrada por 24 municipios[1] y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, allí habita el 82% de la población de la Provincia de Buenos Aires[2]. Son más de 400mil familias las que habitan en Barrios Populares según el RENABAP.
Hacia fines del 2012 se sancionó la Ley 14.449 de Acceso Justo al Hábitat, la cual tiene por objeto promocionar el derecho a la vivienda y a un hábitat digno y sustentable. Dicha ley es la institucionalización de muchos años de lucha de organizaciones sociales y pobladores por sus derechos urbanos.
Morón es uno de 12 municipios del AMBA que ha adherido a la ley. En junio del 2015 se sancionó la ordenanza del Consejo Local de Hábitat y Derecho a la Ciudad[3], la cual tiene por objeto en el artículo 1°: “promover la Gestión Democrática de la Ciudad como principio rector de las políticas de hábitat, vivienda y derecho a la ciudad que se adopten o implemente en el ámbito del Municipio de Morón, de conformidad con la Ley 14.449 de Acceso Justo al Hábitat.”
Municipio de Morón
El Municipio de Morón tiene 321.109 habitantes. Según el Censo 2010, aproximadamente el 1% vive en barrios populares. Daniel D’Alessandro, Director de Hábitat y Vivienda del Municipio, nos comenta que el tejido de Morón es un tejido consolidado, no necesariamente con mucha densidad pero si ocupado. Asimismo afirma, “la problemática es compleja, es grave, es profunda. La escala de la demanda es alta, el contexto sanitario agrava la problemática que tiene que ver con lo ambiental y habitacional” ilustra esta situación con un caso reciente “abrimos una pre-inscripción, en un modelo de cogestión con el PROCREAR Nación y abrimos solicitudes para que la gente pueda inscribirse para un programa de selección que arma el Banco Hipotecario, y en una hora y media se anotaron 600 personas para pedir turno. Y aquí estoy hablando de sectores medios, cuando hablamos de sectores populares, la demanda es aun mayor, la urgencia de respuesta y la complejidad tambien”.
Como particularidad en la organización política del Municipio, la Dirección de Hábitat y Vivienda forma parte de la Secretaria de Planificación Estratégica junto con otras nueve direcciones, entre las que se encuentran ambiente, arquitectura, catastro, planeamiento, obras particulares, infraestructura. La confluencia en esta secretaría es un aspecto favorable en el trabajo articulado de las distintas direcciones cuando los proyectos lo requieren.
Por otra parte, a nivel territorial, Morón esta organizado en 14 Unidades de Gestión Comunitaria (UGC). Estas oficinas descentralizadas promueven un vinculo cercano y una interacción fluida entre el municipio y los pobladores. Lucas Spinosa del Movimiento Evita comenta que “Morón es un distrito ampliamente intervenido desde el punto de vista del hábitat”. Tambien valora la promoción de la participación ciudadana que se establece a partir de la creación de las UGC, “que tienen entre sus incumbencias, competencias en la gesitón del habitat, como por ejemplo, crear consejos vecinales, que discutan los usos del espacio publico, y a su vez esos consejos vecinales participen del consejo local de hábitat.”
Desde el Movimiento Evita Morón, trabajan en cuestiones vinculadas al hábitat en sentido amplio. Lucas Spinosa explica que sus propuestas están orientadas a “repensar y recuperar el uso del espacio público. Uno puede pensar que no es hábitat, pero las repercusiones que tiene en la vida barrial efectivamente da cuenta de lo importante que es para la comunidad”. También menciona que desde la organización, han gestionado recursos para ejecutar mejoras habitacionales de las viviendas de los trabajadores y trabajadoras de la economía popular, así como también de los espacios comunitarios a donde asisten cotidianamente.
Por su parte, la ONG Madre Tierra, trabaja en el municipio de Morón desde antes que se dividiera en Moron-Hurlingham-Ituzaingó. Andrea y Virginia señalan que «Madre Tierra se crea en 1985, y entre sus primeros espacios de trabajo y militancia llevaron a cabo el acompañamiento técnico y social a una red de barrios que había nacido en la década de los ´80, entre los últimos años de la dictadura y en los primeros años de la democracia. Desde allí, conformaron un consejo entre los barrios que estaban sobre tierras fiscales para realizar la regularización dominial de los mismos”. Las acciones de Madre Tierra se desarrollaron de manera sostenida acompañando diversos procesos, alctualmente llevan adelante mejoramientos habitacionales con fondos rotativos, mujeres constructoras y agroecología comunitaria.
La cooperativa “La primera de Gallo” es un caso interesante para conocer otras formas de organización del espacio y los recursos para alcanzar el derecho al hábitat y la vivienda de sus asociados. Como cooperativa han privilegiado los principios de la autogestión, la propiedad colectiva y la ayuda mutua social, desde el 2009 “construyendo sin ladrillos”, siendo que hacia el 2014 firman un contrato de comodato con el municipio e inician la obra, logra realizarse el SUM y un avance en los cimientos. Durante los siguientes años la obra avanza de manera intermitente entre la gestión de recursos estatales y/o privados. Hacia febrero de 2020, según Laura Ferrari “nos encontramos con la reanudación de la obra de nuestra cooperativa. Por otro lado, también como cooperativa participamos del Consejo local de Hábitat, que reúne a varias organizaciones sociales y de vivienda que damos pelea por el acceso a la vivienda digna y a un medioambiente saludable”.
Consejo Local de Hábitat
Haciendo una restitución histórica, en septiembre de 2015, se creó en Moron el Consejo Local de Hábitat y Derecho a la Ciudad, bajo la ordenanza 16954/2015. La primera reunión finalmente se pudo efectuar en 2019 con el cambio de gestión.
A mediados de 2019, de manera autoconvocada, las organizaciones se reunieron para promover nuevamente el Consejo Local. Lucas Spinosa agrega que “Nos reunimos en la 1° de gallo, con un halo de esperanza frente a la renovación de autoridades. Luego tuvimos otra reunión en el comedor de Mari, y redactamos un documento que contiene propuestas para la promoción del hábitat justo y el derecho a la ciudad. Dicho documento se presentó en el municipio de Morón en octubre de 2019.[4] Allí se describe que el Derecho a la ciudad “implica incorporar un nuevo paradigma político y filosófico que no se reduce a lo jurídico, sino a entender el espacio en el que vivimos como el soporte de los derechos humanos, ambientales y laborales. Implica también la prevalencia de lo “público”, es decir considerar a la ciudad como un bien común”
Actualmente, el consejo está conformado por organizaciones que trabajan en hábitat y vivienda, se han incorporado algunos consejos profesionales, y la perspectiva es ampliar la participación en ese grupo. Es un gran espacio de intervención con mucho más potencial del que hoy tiene, por lo que sostenerlo recogiendo los problemas que estas organizaciones han identificado en la práctica territorial, puede ser un aporte significativo en la implementación de la ley de forma situada.
Los y las entrevistadas valoran al Consejo Local de Hábitat como un espacio de ampliación de la democracia. En particular, Lucas Spinosa comenta que “el consejo hoy funciona de manera autoconvocada, a demanda de algunas organizaciones. Y que es necesario para su institucinoalización que el ejecutivo lo convoque y realice la reglamentación que este requiere.” Por su parte, las integrantes de Madre Tierra estan convencidas “que es necesario que organizaciones como nosotrxs construyamos, y validamos que hay que construir un estado garante de los derechos sociales, y garante de la redistribución de la riqueza, de la justicia social.” Esta posición reafirma su compromiso en la participación activa en la promoción del Consejo Local.
En cuanto a la implementación del Consejo Local de Hábitat, desde Madre Tierra plantean que “…una de las grandes dificultades que hay para una buena implementación de estos consejos es que todavía se percibe como un espacio donde la población se acerca a hacer demandas. Y al revés, en realidad el objetivo central de esos espacios es alimentar un diagnóstico a partir de lo que cada uno sabe del territorio”.
Hacia la gestión democrática del hábitat
Hemos identificado que el modo en que las instituciones llevan adelante acciones para la transformación del habitat es sobretodo desde una perspectiva de cooperación y trabajo colectivo. De las entrevistas se desprende que de las acciones que se realizan han prevalecido aquellas vinculadas a mejoramientos habitacionales, actividades de promoción comunitaria, y actividades vinuculadas al fomento de la economía popular.
Asi también, el gobierno municipal muestra una perspectiva de articulación con las organizaciones sociales, y apoyo a las acciones propuestas. Esto se puede observar en la propuesta de las UGL, en el acompañamiento en la gestión a las organizaciones, y en la creación del Consejo Local.
La gestión democrática de la ciudad requiere que estas iniciativas existan, y, a su vez que los espacios de deliberación se constituyan como espacios de toma de decisiones conjunta. La participación de las organizaciones sociales, del estado local, de los colegios profesionales, de los desarrolladores inmobiliarios, la cámara de la construcción resultan relevantes para que el Consejo Local se convierta en una mesa de concertación donde se puedan orientar las decisiones urbanas del municipio en materia de hábitat.
[1] El AMBA comprende a la ciudad de Buenos Aires y a un conjunto compuesto por 24 jurisdicciones (partidos) de la provincia de Buenos Aires cercanas a la ciudad: Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Esteban Echeverría, Ezeiza, Florencio Varela, General San Martín, Hurlingham, Ituzaingó, José C. Paz, La Matanza, Lanús, Lomas de Zamora, Merlo, Moreno, Morón, Quilmes, San Fernando e Islas, San Isidro, San Miguel, Tigre e Islas, Tres de Febrero y Vicente López.
[2] Según el Censo realizado por el INDEC en 2010, en la Provincia de Buenos Aires habitaban 15.625.083 personas, mientras que en los 24 municipios + CABA 12.806.866
[3] Boletín oficial DECRETO Nº 1411/2015 Ordenanza Nº 16954/15, GESTIÓN DEMOCRÁTICA DE LA CIUDAD. CREACIÓN DEL CONSEJO LOCAL DE VIVIENDA, HÁBITAT y DERECHO A LA CIUDAD: https://acortar.link/FIAhL
[4] https://acortar.link/jOKck